Pasapalabra | SOMOS MÁS FELICES AL DAR QUE AL RECIBIR.
19 de mayo de 2021
SOMOS MÁS FELICES AL DAR QUE AL RECIBIR.
El hecho de dar alivia el corazón, porque para practicarlo, es necesario desprenderse de aquello que estamos dando.
Como el desapego nos libera del egoísmo, es natural que se empiece a practicar la generosidad.
SOMOS MÁS FELICES AL DAR QUE AL RECIBIR.
Cuando el amor nos lleva a dar algo, eliminamos todos los pesos del corazón y experimentamos la alegría de hacer más feliz a la otra persona con ese pequeño gesto.
Podemos dar cosas, cariño, amabilidad, conocimientos y nuestros talentos. Cuanto más damos, más nos llenamos de virtudes, que nos llevan no sólo a dar cosas, sino a darnos nosotros mismos en cada gesto.
SOMOS MÁS FELICES AL DAR QUE AL RECIBIR.
Después de un día entero de amar al prójimo, nuestro corazón se regocija con la felicidad inconfundible que nos asegura que hay más alegría en dar que en recibir. (Cf. He. 20,35)
Incluso si al final de este día nos sentimos cansados, que sea el cansancio del amor y de la donación que alegra el corazón y nos acerca a Dios.
Apolonio




