Pasapalabra | SER MISERICORDIOSOS
10 de diciembre de 2020
SER MISERICORDIOSOS
Para asemejarse un poco al de Dios, nuestro amor misericordioso, debe ser más grande que nuestro pecado, más fuerte que la debilidad del otro y superior a la justicia humana.
SER MISERICORDIOSOS
La misericordia es tan importante, que Dios la prefiere a los sacrificios. Perdonándonos unos a otros, crecemos espiritualmente y nos acercamos a Él cada día más.
En varios momentos en el Evangelio, Jesús nos recomienda la bondad y la misericordia de unos con los otros. Él sabe el valor de estas virtudes y que nos servirán como pasaporte al Paraíso.
SER MISERICORDIOSOS
Quien ha practicado la misericordia, sabe de sus efectos en nuestro corazón: paz interior y verdadera alegría.
Quien tiene un corazón misericordioso lleva el amor de Dios al mundo y se convierte en la puerta del cielo para muchos pecadores.
Tener misericordia es ser testigo de la bondad de Dios que, a través de nosotros, sigue buscando a quienes más necesitan de su inmenso amor.
Apolonio