El Perdón en la Confesión
Hay veces que el Alma deja de resplandecer y de iluminar la vida del próximo. Y este próximo es El Hermano.
Pareciera que empeza a existir un distanciamiento entre el cielo y el Alma.
Dios que nos ha pensado desde toda la eternidad… permite que la vida de cada persona este pigmentada de acciones y actitudes de poca o nula carencia de amor, esto para que el Alma sienta la separación al cielo y que entre en conciencia, de que ha perdido la luz, que es Dios. Y que en un deseo de volver a Dios, que es su creador, suspire por encontrar ese bálsamo que le haga sentirse nuevamente viva, ese bálsamo que le repare, que le purifique, que gratuitamente le blanquee para quedar libre de toda mancha.
No por menos, entendiendo este reparo, Jesús cuando estuvo en este mundo pidió de manera especial que cuidaran su mandato de limpiar las culpas en el nombre del Padre, de El mismo y del Espíritu Santo.
Mas que causar agonía por esta imperfección o vergüenza, en quien se encuentra frente a Jesús Reparador en la persona del Sacerdote …Jesús enfatizo su deseo de abrir una puerta permanente, que regale a cada persona, la gracia de entrar y morar en el Alma, junto con el Padre y El Espíritu Santo… que es el Fuego que todo lo transforma en este mundo.